Me encantó la fotografía, muy oscura y con unas tonalidades en el color muy parecidas a El Club de la Lucha y a Ginger Snaps Unleashed que ayudan mucho a describir visualmente el ambiente opresivo del interior de la celda. Los personajes están muy bien definidos, todos con un pasado y cada uno con un motivo de condena muy peculiar. Al primer instante de ver a los presos notaremos que no son unos presos normales, o por lo menos no son los típicos presos comunes que suelen aparecer en películas de presidiarios. Éstos más que presos parecen locos dentro de un manicomio, cada uno atormentado por sus miedos y por su pasado. También hay sangre ¿qué sería de una película sobre El Mal sin sangre? Y varias sorpresas que no desvelaré para que, en el caso de que la veáis, disfrutéis mucho más.
En definitiva me ha gustado mucho y en cuanto pueda le dedicaré un segundo visionado. No sé si llegará por aquí en dvd o en cine, en cualquier caso ya sabéis dónde conseguirla con unos maravillosos subtítulos castellanizados.
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