He visto el concierto más de ocho veces y en cuanto pueda compraré un disco duro única y exclusivamente para conseguir espacio para pasar la cinta a dvd en máxima calidad. De momento la he pasado en baja calidad y he colgado unos clips en el youtube.
El de la cámara soy yo
El cambio de guitarrista no se notó lo más mínimo, de hecho tocaron más rápido y mejor aún que en cd. Thomas se portó como un verdadero hardcore frontman, aunque se le notó algo cansado, cosa que él mismo confesó al público. Y el poco público se entregó cantando con positiva rabia todas las canciones, especialmente las del Exit English. Al final no tocaron en la sala Apolo 2, sino en la 1, en la grande, y el vacío se notó aún más, y no me extraña; 2 de julio y lunes. Yo fui porque tengo fiesta los martes. Esta vez no nos esperamos fuera para hablar con Thomas, como hicimos las otras dos veces. Al parecer, y según he podido leer en varias webs, en Madrid y Bilbao tocaron la misma cantidad de tiempo, unos 45 minutos, y con un setlist parecido, sólo variaron el orden.
Se puede apreciar en los videos mi pasión por los baterías hardcores, este en especial se quedaba en un estado de trance envidiable, y es que Eric Kane no paró de baquetear ni un solo segundo. También se puede apreciar un pequeño problema de enfoque, esto es debido a que el zoom de la cámara sufrió algún que otro percance al último FICEB al que asistí, y obliga a mantener los dedos en tensión para enfocar, si suelto un milisegundo los dedos de la rueda del zoom, se desenfoca.
To The World
We Amplify+Blaze
Infrared
Las cervezas en la barra costaban 4 euros, eran de barril y estaban más aguadas de lo normal, lo que me llevó a contener mis impulsos alcohólicos, aunque no pude frenar unos tres viajecitos a la desértica barra sin contar los bares que visitamos antes. Por cierto, en uno de ellos estaban los técnicos de sonido, y allí mismo probé por primera vez en mi vida las patatas bravas con sabor a chorizo picante, eso sí que es reciclar aceite.
En cualquier caso fue un gran concierto que vuelve a dejarnos con ganas de verlos otra vez con la esperanza de que algún día puedan tocar más de una hora seguida.
De izquierda a derecha, Pau y Woed, los jarcorianos.
Camiseta nueva de ELLA
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