Incident In Lake County estuvo muy bien, The Blair With Project también, pero Incident at Loch Ness es un intento patético y lamentable de falso documental sobre falso documental. El guionista Zak Penn es el encargado de dirigir esta grandísima patraña con ayuda de algunos profesionales del mundo del cine pero que nada tienen que ver con la profesión de actor, excepto Werner Herzog que se desenvuelve de manera algo creíble en contadas escenas y Jeff Goldblum que apenas aparece.
La “película”, por llamarla de alguna manera, arranca como si se tratara de un documental sobre el director Werner Herzog, luego se convierte en un documental sobre una expedición al Lago Ness para descubrir al famoso monstruo, dirigida por el propio Herzog. A su vez Zak Penn quiere rodar otra película más comercial a espaldas de Herzog, y al final todo se convierte en el falso documental de un falso documental con monstruo del Lago Ness incluido.
Desde un primer momento la película comienza mal, y no por la forma en la que está rodada, sino por la repetitiva manera en la que se plantea. Si ya hemos visto falsos documentales y más o menos todos sabemos como funcionan, no sé qué gracia tiene el volver a repetir la misma fórmula y cometer la locura de intentar darle la vuelta. Si ya un falso documental se agarra por los pelos, imaginaos lo que es ver a reconocidos profesionales de la industria del cine haciendo el payaso y el ridículo delante de la cámara, intentando hacernos creer que lo que vemos es real.
La “película”, por llamarla de alguna manera, arranca como si se tratara de un documental sobre el director Werner Herzog, luego se convierte en un documental sobre una expedición al Lago Ness para descubrir al famoso monstruo, dirigida por el propio Herzog. A su vez Zak Penn quiere rodar otra película más comercial a espaldas de Herzog, y al final todo se convierte en el falso documental de un falso documental con monstruo del Lago Ness incluido.
Desde un primer momento la película comienza mal, y no por la forma en la que está rodada, sino por la repetitiva manera en la que se plantea. Si ya hemos visto falsos documentales y más o menos todos sabemos como funcionan, no sé qué gracia tiene el volver a repetir la misma fórmula y cometer la locura de intentar darle la vuelta. Si ya un falso documental se agarra por los pelos, imaginaos lo que es ver a reconocidos profesionales de la industria del cine haciendo el payaso y el ridículo delante de la cámara, intentando hacernos creer que lo que vemos es real.
Lo que me encantan de los falsos documentales es el ambiente opresivo y claustrofóbico, de eso va sobrado el acecho alienígena a un grupo de personas encerrados en una casa en Incident In Lake County, o los jóvenes perdidos en el bosque en El Proyecto de la Bruja de Blair, o la claustrofobia que puede producir perderse en medio del mar en Open Water. Pero es que el barquito de Incident at Loch Ness en lugar de servir de lugar perfecto para hospedar la paranoia colectiva o la claustrofobia marina, se convierte en un circo donde cada uno intenta malogradamente representar su papel y demostrarnos que lo que se mueve en el agua es Nessie.
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