Hace un par de días disfruté con cierta perplejidad de HellBent, un original slasher realizado con pocos medios pero mostrando sobrada pasión por el género. El director de impronunciable nombre Paul Etheredge-Outzts nos sumerge en la noche de Halloween desde una perspectiva que no conocía, el ambiente gay. Un grupo de cuatro jóvenes homosexuales, cada uno con una personalidad muy marcada, deciden salir de fiesta loca aún sabiendo que un peligroso psicópata anda suelto y que decapitó a dos jóvenes gays la noche anterior.
HellBent nos regala un asesino de físico imponente y de disfraz villaniano que, cuchillo con forma de hoz en mano, no duda en decapitar a sus víctimas aprovechando su descomunal fuerza y el desconcierto general de la conocida fiesta norte americana. Así seremos testigos en primera persona de cómo van cayendo decapitados uno a uno mientras transcurre la noche en un ambiente de desenfreno y de apariencia bizarra en el West Hollywood Halloween Carnival.
El problema de HellBent es que no sabemos muy bien por qué mata el asesino, no queda claro si es un asesino exclusivamente de homosexuales, ni sabemos nada de su pasado ni por qué esa obsesión en cortar cabezas. Lo que sí queda claro es que el director ha sido muy cauto con el guión en cuanto a no caer en la fácil homofobia en ningún momento, en cambio, existen algunos agujeros de guión dejando cierta inverosimilitud en algunas escenas, y la verdad es que me sorprende teniendo en cuanto que Joseph Wolf, productor de varias famosas películas del género y, según dicen, co-creador de Halloween, haya ayudado estrechamente al director aportando su experiencia. Quitando esos pequeños puntos negativos os puedo asegurar que es un slasher disfrutable y que me arrepiento de no haber preparado un buen bol de palomitas antes de verlo.
A destacar la canción que abre y cierra la película, Texas Terri Bomb canta una versión de “Lifetime Problems” del grupo punk ochentero The Dicks.
Película no recomendada para homófobos y/o prejuiciosos.
HellBent nos regala un asesino de físico imponente y de disfraz villaniano que, cuchillo con forma de hoz en mano, no duda en decapitar a sus víctimas aprovechando su descomunal fuerza y el desconcierto general de la conocida fiesta norte americana. Así seremos testigos en primera persona de cómo van cayendo decapitados uno a uno mientras transcurre la noche en un ambiente de desenfreno y de apariencia bizarra en el West Hollywood Halloween Carnival.
El problema de HellBent es que no sabemos muy bien por qué mata el asesino, no queda claro si es un asesino exclusivamente de homosexuales, ni sabemos nada de su pasado ni por qué esa obsesión en cortar cabezas. Lo que sí queda claro es que el director ha sido muy cauto con el guión en cuanto a no caer en la fácil homofobia en ningún momento, en cambio, existen algunos agujeros de guión dejando cierta inverosimilitud en algunas escenas, y la verdad es que me sorprende teniendo en cuanto que Joseph Wolf, productor de varias famosas películas del género y, según dicen, co-creador de Halloween, haya ayudado estrechamente al director aportando su experiencia. Quitando esos pequeños puntos negativos os puedo asegurar que es un slasher disfrutable y que me arrepiento de no haber preparado un buen bol de palomitas antes de verlo.
A destacar la canción que abre y cierra la película, Texas Terri Bomb canta una versión de “Lifetime Problems” del grupo punk ochentero The Dicks.
Película no recomendada para homófobos y/o prejuiciosos.
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